Si hay un binomio ideal y sofisticado es el Blanco y Negro. Es la combinación perfecta. Siempre otorgando elegancia y sobriedad a un look. De esta unión surgen varios estampados, entre ellos uno que está de plena tendencia: la pata de gallo.
Este tipo de estampado es “primo hermano” del Tartán, otro gran protagonista del Otoño-Invierno 2013, ya que los dos tienen el mismo origen: Escocia. Los dos triunfan en el street style como en la pasarela. No obstante, hay que tener cuidado a la hora de lucirlos, porque no todas las formas provocaran el mismo efecto.
Si no quieres quedar como una Lady GaGa trasnochada, mejor que hagas del lema “menos es más” tu bandera y dejes atrás las mezclas más arriesgadas (con otros prints como flores, rayas o leopardo). Siempre será más sencillo y dará un resultado más cuidado, si utilizamos una única prenda con pata de gallo y el resto de un único color. Por ejemplo…
O utilizar accesorios con este motivo…
¿Ya tienes algo en Pata de Gallo? Yo he rescatado un vestido de H&M del año pasado y me he comprado un bolsito. ¡Ya me contarás con que prenda o accesorio te has hecho tú!
¡Gracias por tu paradita en el blog, nos vemos en el próximo post!